lunes, 16 de mayo de 2011

Olas entre olas.

Han sido unos días de esos que se te enredan en la memoria y no se marchan jamás. Tantas risas y complicidad. Tanta energía, alegría, paz.. Charlas, brisa, sol. Y ese inconfundible olor a sal: Olas, siempre Olas; en el mar esta ocasión. Esa sensación de sentirte en tu hogar, cuando te rodean, cuando te sonríen, cuando compartís confidencias, cuando te acarician, o te abrazan. Es única. Como cuando te bañas de noche en la playa, y el agua está más tibia, la playa más desierta, el cielo más bonito y sientes que ese momento es solo tuyo. Maravilloso, ¿verdad? No necesitar irse a la costa para experimentarlo. Gracias por existir pequeños ángeles míos..

No hay comentarios:

Publicar un comentario